Para convertirse en buen homeópata y seguir siéndolo, puede decirse desde ya que es necesario ser un lector constante de la Materia Médica Homeopática.

Lea de varios libros y aprenda lo que los distintos autores dicen acerca de los remedios; el leer lo mismo, expresado y ordenado de una manera distinta, siempre es útil. Se debe aprender de muchos si se quiere dominar la materia médica, es decir, sus remedios más comúnmente útiles y tener una idea de sus remedios mas raros, en ocasiones requeridos solamente una o dos veces a lo largo del ejercicio profesional, pero indispensables cuando se los necesita.

La literatura de la Homeopatía es inmensa, contiene también como es natural, gran número de libros sobre Terapéutica Homeopática pero resulta interesante y paradójico mencionar aquí que Hahnemann no dejó escrito tratados de Terapéutica, aunque en el Organon nos dejó las bases filosóficas de la Homeopatía.

Los Libros de Materia Médica pequeños, tienen lo fundamental, se puede escoger y memorizar en principio unos 8 o 9 síntomas importantes y característicos de cada medicamento, los más destacados. En algunas materias médicas como la de León Vannier, está marcado con letra mayúsculas y en negrita lo más destacado de cada remedio, es una guía útil realizar esa lectura y aprendizaje.

Es necesario ser un lector constante de la Materia Médica Homeopática, siempre recordando que no es para estudiarla de memoria y que las Materias Médicas son libros de consulta.

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